Conoce cuáles son los retos y desafíos que enfrentan las mujeres ingenieras dentro del sector construcción

Si bien el Perú tiene el mayor número de mujeres ingenieras respecto a otros países de América Latina, acorde al último reporte de la UNESCO, aún es evidente el rol predominante que tiene el sexo masculino en ciertas áreas del sector construcción.

Sin embargo, la capacidad y talento de un profesional no se mide por su sexo sino por las diferentes habilidades que pueda demostrar como el trabajo en equipo, creatividad e innovación, búsqueda de soluciones a un problema, entre otras; más aún en un sector que está en constante crecimiento y que avanza de la mano con la tecnología. 

En esa línea, y contribuyendo a reducir la brecha de género, es importante recordar que las féminas también pueden asumir responsabilidades y cargos que antes eran tradicionalmente concebidos para varones.

Por eso, Claudia Vargas, Gerente del Área de Investigación, Desarrollo y Control de Calidad de Sika para Perú, comparte algunos retos y desafíos a los que las mujeres ingenieras se enfrentan en el sector construcción para continuar desarrollándose en el mundo de la ingeniería:

  • Crecimiento profesional más lento: debido a que el sector, durante muchos años, ha sido ocupado por el sexo masculino, existe aún un pensamiento machista que dificulta la inserción de las mujeres ingenieras en el campo laboral. Esto genera, en algunas ocasiones, que no puedan proyectarse a un crecimiento profesional a largo plazo. Sin embargo, es necesario apostar por el talento, sea femenino o masculino, y generar espacios y oportunidades que potencien sus habilidades a través de capacitaciones, charlas, mentorías, entre otras.  Incluso, generar iniciativas donde se pueda evidenciar los resultados de las mujeres en el sector, lo que nos permitirá asegurar igualdad de condiciones de oportunidades.
  • Estereotipos: aún existen creencias falsas de que las mujeres ingenieras no pueden asumir cargos gerenciales en sectores duros como el de la construcción, por no tener las habilidades de negociación o ser “más delicadas” que los hombres para la toma de decisiones. No obstante, se está demostrando que las féminas también pueden desenvolverse muy bien en este tipo de sectores. Sus habilidades de trabajo en equipo y capacidad de escucha activa les permite recopilar las diferentes ideas creativas de su equipo para innovar y trabajar en conjunto; así como, entender las necesidades de sus clientes y trabajar en ellas para ofrecer productos nuevos que den solución a un problema.
  • Ambiente de trabajo: debido a las características del sector, algunas mujeres ingenieras pueden enfrentar una cultura laboral poca inclusiva o receptiva hacía ellas, haciéndose visible a través de comentarios exclusivos o sexistas. No obstante, este tipo de situaciones pueden evitarse si la compañía tiene valores que fomenten la inclusión y diversidad de género. Además, mediante el liderazgo de las gerencias se puede impulsar la participación femenina y el trabajo en equipo.

 

 

“En Sika continuamos trabajando en la diversidad y equidad de género, no solo por ser parte de nuestra filosofía corporativa sino porque también es parte de nuestra esencia como colaboradores. Nos sentimos orgullosos de ver cómo las mujeres ingenieras vienen asumiendo jefaturas y gerencias en la empresa, desplegando sus conocimientos para el desarrollo de nuestro país a través de la creación e innovación de productos químicos certificados, de calidad, que son usados para la construcción de grandes obras nacionales”, señaló la Gerente de laboratorio de Sika para Perú.

El país aún tiene un gran reto por delante, reducir más del 70% de brecha de género existente, según el Índice Global de la Brecha de Género. Para ello, se requiere de una mirada holística que incentive la igualdad, la implementación de políticas inclusivas empresariales y el ejercicio de integrar a las mujeres en el campo de la ciencia y tecnología.